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Cuidados básicos de la Calathea
La Calathea es una de las plantas de interior más hermosas que existen por su llamativa apariencia. La familia botánica de esta planta cuenta con una variedad de 25 especies diferentes, pero todas ellas comparten una similitud: el cuidado para mantenerlas tan vivas y hermosas como son.
Para diferenciar entre una Calathea u otra hay que fijarse en las formas de sus hojas por si son de punta de lanza o redondeadas, pero la principal característica de esta familia es el diseño y color que cada una de ellas presenta y son ideales para decorar cualquier espacio.
Para conocerlas un poco mejor, te contamos un poco más sobre este tipo de plantas.
Origen y descripción de la Calathea
Las Calatheas son plantas tropicales que provienen de la familia Marantaceae y dependiendo de la especie, las hojas pueden ser muy variadas en color y forma. Como se puede observar en la imagen, sus grandes hojas son de color verde azulado en la parte superior y en la parte inferior se puede notar un color violaceo. Algo particular de esta planta es que durante el día sus hojas se desdoblan y se vuelven a enrollar durante la noche.
Otra característica de la Calathea es su tallo, el cual es muy fino y alto, y puede variar entre los 40 centímetros y el metro de altura.
Es una planta perfecta para interiores más oscuros o con menos luminosidad. Al ser de una zona tropical de Brasil y Perú, las Calatheas requieren de condiciones de calor y humedad constantes, por eso no es ideal colocarlas en el exterior ya que sus hojas no resisten las bajas temperaturas ni el ambiente seco. Ahora sí, ya nos adentramos en los cuidados de esta bonita planta, sigue leyendo para poder mantenerla en las mejores condiciones.
Con los cuidados adecuados, ¡tus calatheas para que duren años en tu hogar!
Cuidados de la Calathea
1. Iluminación
En su estado natural y de origen tropical de la zona brasileña, la Calathea recibe una luz filtrada a través de las hojas de los árboles de mayor tamaños. Es decir, necesita de una luz sumamente tamizada como pasaría en sus zonas de origen. Si se exponen al sol directo, las hojas se quemarán.
2. Riego
La Calathea es una planta con una necesidad de humedad alta, pero eso no significa excederse con la cantidad de agua a la hora de regar y, en lo posible, debemos evitar los encharcamientos. En épocas de crecimiento, hay que regar a menudo para que su tierra esté en constante humedad. Pero, en las épocas de descanso, espera a que se seque la tierra entre riego y riego para volver a poner agua. No olvides de pulverizarla regularmente o coloca un plato con guijarros y agua debajo de la maceta.
3. Temperatura
En lo posible, mantiene una temperatura ambiental elevada para ayudar a su óptimo desarrollo porque no soportan temperaturas inferiores a 15°. Las temperaturas ideales serían entre los 16 y los 21 grados.
¡Dato importante! En épocas de invierno, no las coloques cerca de las estufas, chimeneas o cualquier otra fuente de calor ya que estarían en un ambiente seco y eso no es lo que buscamos.
4. Abono y limpieza
Durante los meses de primavera y verano, añade cada 15 días una dosis de fertilizante líquido al agua de riego.
Es importante que limpies las hojas con regularidad para sacarle el polvo que se acumula en ellas. Si el polvo está más adherido, puedes utilizar un plumero o una esponja húmeda para no romper sus hojas.
5. Trasplante
Trasplantar una Calathea es bastante difícil porque puedes dañar a la planta, pero no es imposible. Conviene trasplantar a un tiesto mayor cuando vemos que sus raíces han logrado llenar el contenedor. Si vemos que ya están casi saliendo, ese es el momento correcto. Ten en cuenta que el mejor momento del año para su trasplante es en primavera.
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Ahora que conoces los cuidados de la Calathea, es la oportunidad de disfrutar de la planta interior más llamativa y hermosa que existe. Cuéntanos en redes qué te parecieron estos consejos o si te dieron ganas de comprarte una ;)